Riverside- Shrine of New Generation Slaves (Progressive)- 2013

Riverside, la verdad es que estos polacos son un descubrimiento. Siempre con un sonido muy cuidado y con muy buen saber hacer. Sus discos solían ser un poco más duros y con muchos más toques progresivos, pero en 2013 sacan esta perla, un disco muy intimista, y delicado. Pero con pasajes y canciones realmente maravillosas.

Yo los conocí con su anterior disco "Anno Domini High Definition" y seguidamente me devore toda su discografía en un par de días, y me acuerdo que nada mas ver la carátula de este nuevo disco pensé, ¡Esto va a ser bueno!. Y por lo menos a mi no me defraudo.

Canciones largas hechas con mucho gusto, con mucho protagonismo del bajo en todas, con momentos de lucidez de todos los instrumentos durante todo el álbum. Y sobretodo, esa voz aterciopelada que tiene Mariusz Duda, un genio compositor donde los haya.
Del disco conocíamos a priori el single "Celebrity Touch", una canción con un ritmo animado y que entra muy fácil, con una guitarra maravillosa y un estribillo pegadizo. Pero a mi la parte que me gusta de este disco, es esa parte personal e intima que muestran con tanta facilidad estos polacos en canciones como la maravillosa "The depth of self-delusion" tema de 7:40 minutos del que solo quieres que no se acabe.¡Puff, me encanta!. O la otra joyita "We Got Used To Us", con el sonido del piano y la voz desde el principio, creando un sentimiento brutal, y después entran el resto de instrumentos y empieza lo bueno. Remarco otra vez, me encanta como el bajo se hace notar todo el disco y todas las melodías que hace.

"Escalator shrine" el tema más largo del disco, con una esencia jazz genial, y una voz muy acertada (en este tema y todo el disco), esa subida de intensidad con un montón de toques progressive a mitad de canción, la que más recuerda a sus anteriores discos. ¿Y es que solo hay temazos?.  Pero si hay un tema que me enamoro desde la primera vez que la escuche fue "Deprived" y sus 8 minutos de pura maravilla, y el sonido del saxo al final del tema cuando ya pensabas que ya todo había terminado, genial.

En resumen, un disco muy personal, perfecto para ponérselo una tarde mientras lees y dejarte llevar por el. No esperéis tralla como es habitual en los discos sobre los que suelo hacer reseña, sino tranquilidad y melodías geniales por las que dejarse atrapar.

Autor reseña: Jorge Bielba